sábado, 25 de fevereiro de 2012
INDELEBLE HUELLA
El autobús nocturno avanza
por la estrecha carretera,
atraviesa el puente y sube por la variante
que lo eleva por encima de los tejados.
Traquetean las ruedas en las juntas de dilatación
del moderno puente tres veces inaugurado.
Luego, tal como ha entrado desaparece
engullido por la oscuridad y una curva.
Ha pasado el autobús por encima
de la intimidad de muchas casas, sin entrar en ellas.
A menudo pasamos así por la vida,
de noche y sin entrar en la intimidad de nadie
sin dejar apenas una indeleble y oscura
huella de nuestro paso.
Subscrever:
Enviar feedback (Atom)
1 comentário:
Que triste verdad? Pero hay mucha gente así.
Enviar um comentário